Chamanes eléctricos en la fiesta del sol
Mónica Ojeda
Año 5540 del calendario andino. Noa decide escaparse de su Guayaquil natal con su mejor amiga, Nicole, para asistir al Ruido Solar, un macrofestival popular que anualmente congrega, durante ocho días y siete noches, a miles de jóvenes —entre músicos, bailarines, poetas y chamanes— a los pies de uno de los numerosos volcanes de los Andes. Atrás quedan las familias y la violencia de las ciudades, y se despliega un paisaje alucinado que tiembla al ritmo de la música y las erupciones volcánicas bajo un cielo surcado por meteoritos. Para Noa esta será la primera parada antes de ir al reencuentro del padre que la abandonó cuando era una niña y que desde hace años habita los bosques altos, un territorio donde también se esconden los desaparecidos, aquellos que una vez subieron al Ruido y nunca regresaron a sus hogares.
Sostenida poruna lírica extraordinaria, una estética deslumbrante y un brutal sentido del ritmo, Chamanes eléctricos en la fiesta del sol es un gran viaje místico al corazón primitivo de la música y de la danza; un viaje lisérgico y emocional que es a la vez la búsqueda de un padre y de un sentido de pertenencia en un mundo que solo conoce la pérdida y el desamparo.
La crítica ha dicho:
«Una de las más poderosas novelistas latinoamericanas actuales».
Carlos Pardo, El País
«Estamos ante una escritora seria, valiente, exigente, que ya puede ser considerada una de las mejores narradoras jóvenes de la literatura hispanoamericana».
Jorge Carrión, Otra Parte
«El presente de esta escritora se dirige hacia un futuro feroz».
Ricardo Baixeras, El Periódico
«Un soplo de aire fresco sacude la literatura latinoamericana».
Xavi Ayén, La Vanguardia
«Excelentes cuentos que invitan a taparse los ojos con la mano. Y dan calambre. Hay que atreverse a leer a esta sabia escritora de ambición telúrica».
Marta Sanz, El País (sobre Las voladoras)
«Su narrativa posee una energía que no deja descansar allector, sus relatos son como imágenes que se clavan en el cerebro».
Ariana Basciani, The Objective (sobre Las voladoras)
Mónica Ojeda
Año 5540 del calendario andino. Noa decide escaparse de su Guayaquil natal con su mejor amiga, Nicole, para asistir al Ruido Solar, un macrofestival popular que anualmente congrega, durante ocho días y siete noches, a miles de jóvenes —entre músicos, bailarines, poetas y chamanes— a los pies de uno de los numerosos volcanes de los Andes. Atrás quedan las familias y la violencia de las ciudades, y se despliega un paisaje alucinado que tiembla al ritmo de la música y las erupciones volcánicas bajo un cielo surcado por meteoritos. Para Noa esta será la primera parada antes de ir al reencuentro del padre que la abandonó cuando era una niña y que desde hace años habita los bosques altos, un territorio donde también se esconden los desaparecidos, aquellos que una vez subieron al Ruido y nunca regresaron a sus hogares.
Sostenida poruna lírica extraordinaria, una estética deslumbrante y un brutal sentido del ritmo, Chamanes eléctricos en la fiesta del sol es un gran viaje místico al corazón primitivo de la música y de la danza; un viaje lisérgico y emocional que es a la vez la búsqueda de un padre y de un sentido de pertenencia en un mundo que solo conoce la pérdida y el desamparo.
La crítica ha dicho:
«Una de las más poderosas novelistas latinoamericanas actuales».
Carlos Pardo, El País
«Estamos ante una escritora seria, valiente, exigente, que ya puede ser considerada una de las mejores narradoras jóvenes de la literatura hispanoamericana».
Jorge Carrión, Otra Parte
«El presente de esta escritora se dirige hacia un futuro feroz».
Ricardo Baixeras, El Periódico
«Un soplo de aire fresco sacude la literatura latinoamericana».
Xavi Ayén, La Vanguardia
«Excelentes cuentos que invitan a taparse los ojos con la mano. Y dan calambre. Hay que atreverse a leer a esta sabia escritora de ambición telúrica».
Marta Sanz, El País (sobre Las voladoras)
«Su narrativa posee una energía que no deja descansar allector, sus relatos son como imágenes que se clavan en el cerebro».
Ariana Basciani, The Objective (sobre Las voladoras)
Mónica Ojeda
Año 5540 del calendario andino. Noa decide escaparse de su Guayaquil natal con su mejor amiga, Nicole, para asistir al Ruido Solar, un macrofestival popular que anualmente congrega, durante ocho días y siete noches, a miles de jóvenes —entre músicos, bailarines, poetas y chamanes— a los pies de uno de los numerosos volcanes de los Andes. Atrás quedan las familias y la violencia de las ciudades, y se despliega un paisaje alucinado que tiembla al ritmo de la música y las erupciones volcánicas bajo un cielo surcado por meteoritos. Para Noa esta será la primera parada antes de ir al reencuentro del padre que la abandonó cuando era una niña y que desde hace años habita los bosques altos, un territorio donde también se esconden los desaparecidos, aquellos que una vez subieron al Ruido y nunca regresaron a sus hogares.
Sostenida poruna lírica extraordinaria, una estética deslumbrante y un brutal sentido del ritmo, Chamanes eléctricos en la fiesta del sol es un gran viaje místico al corazón primitivo de la música y de la danza; un viaje lisérgico y emocional que es a la vez la búsqueda de un padre y de un sentido de pertenencia en un mundo que solo conoce la pérdida y el desamparo.
La crítica ha dicho:
«Una de las más poderosas novelistas latinoamericanas actuales».
Carlos Pardo, El País
«Estamos ante una escritora seria, valiente, exigente, que ya puede ser considerada una de las mejores narradoras jóvenes de la literatura hispanoamericana».
Jorge Carrión, Otra Parte
«El presente de esta escritora se dirige hacia un futuro feroz».
Ricardo Baixeras, El Periódico
«Un soplo de aire fresco sacude la literatura latinoamericana».
Xavi Ayén, La Vanguardia
«Excelentes cuentos que invitan a taparse los ojos con la mano. Y dan calambre. Hay que atreverse a leer a esta sabia escritora de ambición telúrica».
Marta Sanz, El País (sobre Las voladoras)
«Su narrativa posee una energía que no deja descansar allector, sus relatos son como imágenes que se clavan en el cerebro».
Ariana Basciani, The Objective (sobre Las voladoras)